¿ESTÁ LA EDUCACIÓN FÍSICA Y EL DEPORTE ACTUAL IMBUIDOS DOCTRINALMENTE A NIVEL IDEOLÓGICO? ¿ESAS INFLUENCIAS SON ACTITUDES O PROVIENEN DEL PASADO DOCENTE?
A
continuación, en esta práctica, se tratará si la Educación Física y el deporte
actual son imbuidos doctrinalmente a nivel ideológico y si las influencias son
actuales o del pasado.
Entendemos ideología como el
conjunto de ideas que caracteriza a una persona o un colectivo en cuanto a
ideas sociales, políticas o religiosas. La dimensión social, se asocia a las
relaciones que se establecen entre los grupos y las instituciones. El deporte, se
valora, se inculca y se reproduce, por tanto, se considera una ideología. Según
a Francisco L. Otero, la “Educación
Física se ocupa de estimular y operar aprendizajes que son decisivos para la
existencia humana que afectan por lo tanto a la totalidad del ser […] trata de
educarlo, de acrecentar su potencial como ser viviente: recursos, autoestima,
actitudes, hábitos, formas de pensar y de sentir, […] el potencial educativo es
enorme, […].
García Ferrando, en 1990, y Hernández
Moreno en 1994 definen el deporte como un fenómeno social muy característico e
influyente en la sociedad. Parece una práctica simple, pero requiere una gran
complejidad cultural y social basada en la motricidad del cuerpo que con
esfuerzo y trabajo es asequible para cualquier persona.
En cuanto al concepto de deporte,
según Mauro Valenciano en su libro Buen deportista,
mejor persona: ética y deporte (2010, 13), se define como cultura física y
no como algo que merece una reflexión racional desde el ámbito de la Academia.
Realizar de forma regular el deporte
ayuda a mejorar la forma física, así como aumentar la autoestima y la capacidad
de relacionarse con los demás. Ha demostrado ser
una práctica muy beneficiosa en la prevención, desarrollo y rehabilitación de
la salud, a la vez que ayuda al carácter, la disciplina y a la toma de decisiones en
la vida cotidiana.
El deporte es manifestación expresiva, estilo de vida, modelo de
comportamiento, medio de comunicación, ideología, pasión, tecnología, charla
cotidiana (Porro 2001): la danza y el juego y especialmente, el juego deportivo
constituyen manifestaciones capaces de destacar con extraordinaria eficacia la
red subterránea de las relaciones entre los grupos y los individuos en la
sociedad (Elías, Dunning 1992).
El
deporte nace como disciplina en España y en otros países europeos a principios del siglo XIX, por Francisco
Amorós. Se quería conseguir en las escuelas que esta asignatura cobrara
importancia. Después, le siguió Gaspar Melchor de Jovellanos, quien incluyo la
instrucción física y la creación de docentes cualificados con la finalidad de
formar personas saludables, pero este plan no pudo llevarse a cabo por la
política impuesta entonces. En 1850 a 1870, comenzaron a divulgarse gimnasios
para practicar deporte, por lo que era necesaria la incorporación de
profesionales. Durante muchos años, la educación física no se llegaba a
desarrollar totalmente. Fue a partir de la Institución Libre de Enseñanza
cuando empezó a resurgir. Se practicaba a través del juego pero con fines de
educar en valores.
Del mismo modo, en la época
franquista en la que todo joven español había de servir a España, incluso morir
por ella, la Educación Física habitaba a los individuos a ser fuertes y
luchadores por lo que pasaba a ser un derecho, inculcando valores para
fortalecer el cuerpo y la mente.
La educación física, tiene fines
educativos, el deporte concretamente no, y debería estar orientado a ello, pero
hay factores que lo limitan. Por ejemplo, que al incentivar la competitividad,
genera violencia entre aquellos que lo practican, hay personas que llegan a
obsesionarse con su rendimiento y puede ser perjudicial para su salud,
afectándole psicológicamente. Esto, podría hacer que los alumnos/as que
recibiesen clases de Educación Física empezaran a interesarse por el deporte, y
así fomentar hábitos para el desarrollo personal.
El deporte, principalmente está
orientado a fomentar la competitividad, como un trabajo, o con fines políticos,
aunque según la Constitución Española refleja en el artículo 43.3 del Título I,
Capítulo III, que los poderes públicos deben velar por la educación sanitaria,
la educación física y el deporte, así como facilitar un buen uso del ocio.
Desde la infancia, los niños/as empiezan a ver esto como tal, no como para
disfrutar y adquirir valores.
El deporte, es una creación de los humanos, ya
que, posee ésta capacidad motriz desde sus orígenes, por lo que existen
referencias de actividades físicas desde la prehistoria. Danzas, rituales o las
actividades como la caza. Estas manifestaciones de la motricidad distan en gran
medida lo que hoy entendemos por deporte.
El deporte, según Hargreaves (1993)
constituye un proceso de legitimación de la hegemonía masculina, un foco
simbólico del poder masculino.
No obstante, cabe decir que, el
deporte surgió como practica única y exclusivamente para el sexo masculino, por
lo que, la práctica para las mujeres, estaba prohibida.
La relación de la mujer con la
actividad física, ha estado mediatizada por las concepciones biológicas sobre
el cuerpo femenino, la inferioridad con respecto a los hombres y la idea de proteger
y cuidar su cuerpo para su fin biológico, la maternidad (Vázquez, 2001).
En
cuanto a la realización del deporte según el sexo, en
casi todos compiten por las distintas capacidades físicas, aunque los triunfos
olímpicos hay mujeres que han conseguido la obtención de medallas.
La mujer en el deporte, históricamente ha permanecido
excluida, como de tantas otras ocupaciones atribuidas exclusivamente a los
hombres. En la práctica del deporte, la
separación entre chicos y chicas está, por el momento, avalada por las
diferencias físicas de hombres y mujeres, aunque en muchos deportes, compiten
ambos sexos.
Hoy en día, las mujeres ya practican todo tipo de deporte.
Las diferencias entre sexos se han ido acortando y ha habido una importante
evolución pero es cierto que se siguen transmitiendo valores estereotipados
asociados según el género. Se le sigue dado más protagonismo al deporte
practicado por hombres y es el que tiene más exclusividad informativa en los
medios de comunicación. No debería existir modalidad deportiva en cuanto al
género y
se debe facilitar una elección libre y no estereotipada en el deporte sin
ningún tipo de barreras.
Como conclusión, la Educación Física
nos facilita alcanzar y a comprender nuestro propio cuerpo, sus posibilidades, conocer
y dominar diversas actividades corporales y deportivas, etc., de modo que en el
futuro podamos escoger las más convenientes para el desarrollo y creación
personal,
mejorando a su vez la
calidad
de vida por medio del enriquecimiento y disfrute personal.
Como
opinión personal, quiero añadir que, en el ámbito educativo debería fomentarse
más el deporte, apoyado en la educación física, para que así se transmitan unos
principios y valores producentes para el futuro. Desde mi experiencia, a los
largos de los años de formación académica en los centros educativos, no me han
incentivado para que me guste el deporte. Lo he vivido como una disciplina
dura, en la que no he disfrutado de tal experiencia. Aunque hoy en día es una
actividad que me relaja y me crea una sensación de bienestar tanto física como
mentalmente.
BIBLIOGRAFÍA
OTERO,
F. “Bases espitemológicas de la Educación Física Escolar”. En: 1º Simposium
Internacional sobre Educación Física Escolar y Alto Rendimiento.